Histórico
11 julio 2018El Enganche

La efemérides de Croacia

FBL-WC-2018-MATCH59-RUS-CRO

Por Miguel Ángel Ruiz (@migruizruiz)

El año 1998 trajo consigo muchas cosas. Mientras los americanos ponían en órbita la nave Prospector para orbitar alrededor de la Luna en busca de cristales de hielo, el grupo español Mecano sacaba a la luz su álbum “Ana José Nacho”. No eran los únicos, pues en ese mismo año, Shakira, hoy conocida por su “Waka-Waka” en el Mundial de 2010, sacaba uno de sus primeros discos, “¿Dónde están los ladrones?”, en el mismo año que aparecía en las carteleras “Armageddon”, protagonizada por Bruce Willis y Ben Affleck y con una banda sonora imposible de olvidar, con Aerosmith a los mandos. Tan reconocible como fue en España la canción “A lo loco”, que Pau Donés escribió para otro film, “El Milagro de P. Tinto”.

Es curioso que comience esto así, pero creo que nada mejor que ponernos en situación para recordar juntos aquel año 1998 del Mundial de Francia. Cuatro son las casualidades que unen el año 1998 con el 2018, en sus mundiales de fútbol. La primera, el color de las banderas de los países organizadores (aunque en otro orden). La segunda, la importancia histórica de los himnos de los organizadores, la Marsellesa, y el actual Himno Ruso, musicalmente exacto al que usó la URSS. La tercera, una Francia finalista, certificada ayer ante Bélgica. Finalmente, la última casualidad, una brillante Croacia semifinalista, buscando con ahínco un puesto en la final, con la vitola de revelación del campeonato.

La Croacia de Rakitic y Modric frente a un reto Mundial

Croacia en 2018 sigue teniendo ese halo de revelación en cada partido. La sociedad Modric-Rakitic (lejos de los análisis cansinos para demostrar quién es más relevante en clave Barça y Madrid) se empeña en dejarnos, a los amantes de fútbol, con la boca abierta en cada partido. Su complicidad a la hora de asociarse y su calidad para surtir de balones en 360º impresiona hasta al más frío de los aficionados.

La de Zlatko Dalić es una selección centrada en el balón, hecho que se refleja observando la convocatoria de los centrocampistas elegidos. Una nómina en la que Kovacic, Brozovic, Badelj o Bradaric no hacen sino acrecentar la capacidad de generar juego, añadiendo ese talento al ya obvio de los ya citados Ivan y Luka. Si en 1998 la Croacia de Boban, Suker o Simic consiguió el tercer puesto con un fútbol centrado en el orden defensivo y su definición en ataque, la de la actualidad se centra en el buen trato al balón y a las transiciones rápidas como garantía de éxito.

Una columna vertebral revelación en Rusia

Entre los causantes de tan buenos resultados en la actualidad, cinco nombres propios, de cada línea de juego, responsables del éxito de la selección “vatreni”. Para empezar, las manos y los reflejos de Subasic, portero del Mónaco que en este Mundial ha sido clave, ante todo en las dos tandas de penalti que han debido superar para llegar hasta este punto (ante Dinamarca y ante Rusia). En la defensa, Vida, central del Beşiktaş que, a pesar de partir con menos cartel que otros como Lovren, ha conseguido una estabilidad absoluta para Croacia y ha anotó un gol vital ante Rusia. En el mediocampo, necesario citar a los dos baluartes: Modric y Rakitic. Pudiendo demostrar en dos posiciones en las que rotan sin problema su calidad a raudales, todos los balones han de pasar por sus pies si quieren merecer la pena. Todo el juego procede de sus movimientos y su talento ha empujado, como en el choque ante Rusia, a la selección a no rendirse ante la adversidad. Además, no le temen al liderazgo y a la responsabilidad, lanzando ambos en las dos tandas de penaltis por las que debieron pasar. Y por último Mandzukic. A pesar de no estar siendo tan vital a nivel goleador (solo un tanto ante Dinamarca), es el hombre en punta preferido por el seleccionador, por todo lo que genera con sus movimientos en las defensas rivales.

El objetivo: superar a los héroes del 98

Aunque el gran talento de la Croacia de Francia 98 haya hecho que pocos nos hayamos olvidado de nombres como el de Prosinecki o Suker, la realidad es que el talento que mueve hoy la selección arlequinada lo supera con creces y tiene una oportunidad de oro para poder superar los logros de sus predecesores.

Aunque delante tengan a la Inglaterra de Southgate, que por primera vez en años parece haber armado un conjunto digno de la Copa del Mundo, los de Dalić son conscientes de la trascendencia y saben que nunca antes se ha estado tan cerca y con mejores sensaciones que en este Mundial de Rusia 2018. Por jugadores, sistema y cruce, Croacia tiene la oportunidad de conseguir llegar a su primera final de la historia y disputar hasta el último segundo el título de campeón del Mundo, algo que en 1998 no pudieron conseguir, tras la derrota ante Francia por dos a uno (goles de Suker y Thuram, que marcó doblete) en la semifinal.

Desde luego, así como la calidad de la Croacia de Rusia 2018 está fuera de toda duda, su capacidad de sufrimiento no va a la zaga. Las dos tandas de penaltis vividas en los cruces de octavos y de cuartos de final demuestran que la calidad de esta Croacia actual va más allá de lo físico o de su habilidad: está preparada psicológicamente para competir con cualquiera.

Contacta con El Enganche




Nuestras redes sociales

 

Contacta con nosotros

Puedes ponerte en contacto con El Enganche a través de este formulario.

Envíanos tus consejos, dudas, quejas o sugerencias para ayudarnos a mejorar. Rellena el formulario y haznos llegar tu mensaje. #yosoyenganche