Histórico
12 marzo 2014Jose David López

Leverkusen: Emre Can, comodín como peligrosa virtud

Emre Can - Leverkusen

Una perfecta lectura de cada movimiento actual y futuro, una claridad de imagen nítida para automatizar cada posibilidad en segundos y una ejecución determinante con la habilidad de quien se siente dominador. El ajedrez es la práctica ‘deportiva’ de mayor salud mental, capaz de aglutinar en cada decisión un sinfín de alternativas y acumular sensaciones mentales-psicológicas como pocas actividades competitivas requieren. Preguntando uno a uno a los mejores del mundo, la gran mayoría de ajedrecistas admiten que su gran deseo sería que, en mitad de una partida importante, algunas de sus piezas tuvieran aptitudes conforme a la necesidad del momento. Es decir, que un caballo actúe de reina, que un peón se mueva como un alfil o que el rey no sea puesto en peligro por gozar de una defensa impenetrable. Ese ha sido una y mil veces el sueño repetido en la inteligente cabeza de Emre Can, el varias veces campeón europeo y mundial juvenil y hoy, estratega de oro para el futuro del ajedrez en Turquía.

Ese éxito de la perla del tapete, se ha traspasado durante los últimos años al fútbol, donde ha crecido la relevancia de su ‘clon’ sobre el césped. Allí, en la Bundesliga, con ascendencia igualmente turca y, curiosamente, con similar nombre y apellidos, Emre Can transmite las mismas sensaciones gracias a su admirable capacidad para cumplir deseos de los técnicos como solución improvisada y actitud ‘comodín’ dentro de distintos esquemas. El germano-otomano, de 20 años tan solo, es uno de los mejores ejemplos de necesidad táctica, alternando posiciones medulares y defensivas en los últimos años hasta convertirse en una solución correcta tanto en el mediocentro como en el lateral diestro y, sobre todo, por falta de un referente actual en esa posición, en el carril zurdo que ha terminado haciendo suyo este curso en el Bayer Leverkusen. Y todo, pese a que es diestro, lo que le obliga a jugar a pierna cambiada. Un ejemplo ideal de cómo una joven promesa que empezó siendo estelar en divisiones inferiores como enganche o jugador con plena libertad de movimientos por detrás de los delanteros, ha tenido que readaptarse a las obligaciones del primer nivel pese a que ello suponga convertirse en un defensor.

Ha pasado de ser un jugador talentoso-elegante cerca del área, a un correcto y potente carrilero zurdo. Una peligroa aunque necesaria actitud de comodín

Yo recuerdo haberle visto en sus primeros años como juvenil prometedor en diversos campeonatos y su rol era muy ofensivo. Tanto que se explotaba perfectamente su potencia, su gran capacidad para recorrer muchos metros con la pelota controlada o en continuación dentro de un ataque de su equipo y, sobre todo, su disparo desde media–larga distancia. Un chico que, además, tiene una elegancia sublime con la pelota en los pies, tiene mucha corpulencia por lo que en la medular era claramente dominador en esos años y que, además, sabe leer muy bien. Y es que era capaz de ser el distribuidor ofensivo o retroceder unos metros su posición para ser el organizador y el primer hombre que iniciara la transición ofensiva. Todo eso ha ido quedándose en el olvido con el paso de los años y desde que llegó a la élite, los cambios de posiciones han sido constantes. Hoy es lateral zurdo, creo que así hay que evaluarlo y, como tal, a mí me deja más dudas porque aunque es potente y su cuerpo le facilita ser correcto en acciones defensivas, la sensación que daba en posiciones más adelantadas era de manifiesta relevancia para el devenir de los partidos. Un ‘experimento’ plausible como actitud y mejora de capacidad para ocupar varias demarcaciones, pero un ‘experimento’ negativo para disfrutar de su mejor versión.

Emre Can - AlemaniaEmre Can nació en Frankfurt pero su familia, naturalmente a tenor del nombre, es turca. Empezó a jugar al fútbol con solo 6 años en el SV Blau- Gelb Frankfurt, el equipo de su barriada y a los 12 se enroló en las divisiones inferiores del Eintracht de Frankfurt. Pero tanto destacó en diversos campeonatos adolescentes que con 15 años apareció el gigante que todo lo acecha, el Bayern de Múnich, para llevárselo a sus juveniles y explotarlo definitivamente. Curiosamente, desde que llegó al cuadro bávaro, siempre jugó con chicos dos años mayores que él y marcaba diferencias sin problemas, consiguiendo varios torneos y ligas que le situaron como la gran perla de la cantera muniquesa de los últimos años. Llegó al segundo equipo y hace dos campañas incluso jugó la primera vuelta con el juvenil A, llegó a ser convocado dos veces sin jugar con el primer equipo hasta que lo logró en agosto de 2012 ante el Dortmund en la Supercup, días después de que, debido a las expectativas creadas, el club le blindara con su primer contrato profesional.

No llegó a convencer a Guardiola esta pasado verano, cuando dio la aprobación para venderlo a un Leverkusen donde vive su primera gran experiencia en élite

El curso pasado, siendo siempre mediocentro, jugó 4 partidos con el Bayern pero ante la ausencia total de opciones claras, este pasado verano aceptó la oferta del Bayer Leverkusen. Guardiola, que sí le había probado bastante en la pretemporada de verano, no confió en sus cualidades, le abrió la puerta y se marchó por 6 millones aunque los muniqueses se guardaron una opción de compra que pueden ejecutar este año y el próximo. Ahora, con Sami Hyypia, se ha asentado con muchos minutos debido a las necesidades defensivas de un equipo corto de efectivos y capacidad en los laterales. Y para los que lo hemos visto como llegador, como hombre de potencia y con capacidad de disparo importante, verlo ahora luciendo el número 10 jugando de lateral izquierdo, ofrece numerosas lecturas. La primera, que puede que su capacidad de comodín le permita ser importante a largo plazo o que esas cualidades ofensivas, reaparezcan si se le permite dentro de un esquema más adaptado a sus virtudes.

A nivel internacional, ha jugado en todas las categorías de Alemania desde Sub 15 hasta Sub 21, por lo que puede jugar aun con Turquía si lo desea aunque sus declaraciones siempre defendieron su bandera germana. Ha sido estrella del sub 17 de 2011 donde fueron sub-campeones y mucho más meses después en el Mundial donde fueron terceros, siendo en ese torneo donde yo lo vi mucho más y donde creo que todo el mundo apuntó su nombre como chico con un potencial brutal. Ese mismo guion no se ha escrito tan sólidamente desde que apareció en el primer nivel, aunque es cierto que su primera escena era nada menos que el Bayern, que la competencia fue feroz y que es ahora en Leverkusen (y recuerdo que solo con 20 años aun), donde acumula su primera campaña completa con la estructura competitiva como para saber qué futuro puede depararle la élite. Que sea estrella o no, dependerá de los próximos años pero si la capacidad de actuar como comodín es clave en el ajedrez para un Emre Can, puede que para el ‘otro’, lo acabe siendo también en el fútbol…

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