Histórico
19 diciembre 2012Jose David López

Los equipos revelación del curso 2012

Las Navidades son etapa de liberación, relax y tranquilidad reunidos en familia. Días de paz, de unión con aquellos que no ves habitualmente por labores diarias y de análisis, pues todos recordamos cómo o qué estábamos haciendo el año anterior en estas fechas tan concretas. En fútbol, la época navideña responde a un perfil bien diferente, completamente opuesto y delicadamente peligroso. Toca analizar cómo se ha desarrollado la primera fase del curso, testear la situación del entorno y, desde luego, imaginar las previsiones para los próximos seis meses de competición que acabarán siendo determinantes. Pero algunas de esas calificaciones son muchísimo más agradables y plausibles de lo que las previsiones previas habrían determinado. Proyectos que han encontrado la satisfacción con destacadas incorporaciones, una poderosa solidez defensiva, una enorme capacidad de bloque que encuentra réditos y un técnico que respira con una anchura pulmonar que jamás habría imaginado meses atrás. Son aquellos ‘elegidos’ que sorprenden con sus resultados este curso 2012 y que se han convertido en los clubes revelación contra pronóstico. Cinco de ellos podrán despedir el año con una creciente y absolutamente merecida sonrisa.

West Bromwich (Inglaterra): Pese a que en las últimas semanas las grandes sensaciones previas han reducido su intensidad, los Baggies han logrado convertirse en el equipo de moda en la Premier League. Una grandísima lectura de sus limitaciones, la claridad de quien tiene varias cualidades explotadas muy por encima de lo previsto y, sobre todo, una enorme capacidad competitiva en todo tipo de escenarios sin mostrar arrugas. El ‘experimento’ del club con Steve Clarke (ayudante de Kenny Dalglish en Liverpool estos años), no gozaba de mucho respeto entre los hinchas pero solo hicieron falta unas semanas para sentenciar que su estudio minucioso de cada planteamiento, está consiguiendo convencer. Una medular fuerte pero con capacidad de amplitud (Yacob), llegadas desde segunda línea (Morrison, Brunt, Odemwingie) y un claro protagonista ofensivo que ha multiplicado sus grandes virtudes este curso (Long, presionado por la competencia de un Lukaku que aprovecha muy bien su rol de revolucionador final). Todo mezclado con sacrificio, se traduce en posiciones europeas.

Lorient (Francia): El proyecto más longevo, regular y apreciado entre aquellos románticos del fútbol galo. El cuadro bretón, dirigido desde 2003 por Christian Gourcuff, sufrió muchísimo más de lo esperado el curso pasado cuando las bajas que siempre sufre cada verano, debilitaron al equipo de raíz. Pero unos meses más tarde, el técnico más visionario y filosófico (tiene un don de palabra sencillamente espectacular), recuperó las mejores sensaciones. Luchando de manera inesperada por zona europea (está ahora mismo a cinco puntos de los tres líderes de la Ligue 1), ha vuelto a crear una plantilla competitiva, capacitada para dar lucha ante cualquier rival y en cada escenario, aprovechando además muy bien su fiabilidad como local en el siempre coqueto y singular Yves Allainmat. El veteranísimo Audart bajo palos, el potente Koné como hombre fuerte en la zaga, el recorrido-brega de Romao-Corrgnet-Traoré en una medular física pero con criterio y, sobre todo, la reactivación en la carrera de un para muchos olvidado Jeremie Aliadiere (suma seis goles), causantes del rendimiento extraordinario de un equipo además simpático a todos ojos.

Eintracht Frankfurt (Alemania): Quince caras nuevas, 7.4 millones de euros invertidos en fichajes y una clave absolutamente determinante, el trabajo continuado en una base con identidad y estilo agresivo como local, así como más inteligente y reflexivo a domicilio. El gran culpable de la transformación revelación de Europa es un clásico de los banquillos como Armin Veh (tan obligado a la renovación como la naturaleza de su propio club indica). Caracterial, disciplinado, poco amigo de jugadores mediáticos, con un estilo basado en vestuarios muy unidos que transporten su fiabilidad al césped para actuar como un bloque, no conoce éxito sin esfuerzo colectivo. La revolución que supuso el ascenso ha sido absolutamente notable en la plantilla y en las intenciones del club, que ha acertado completamente en todos sus movimientos de mercado. La base que logró regresar al primer nivel, apenas puede mantenerse hoy en día, más allá de que Sebastian Jung sea ya uno de los mejores laterales derechos jóvenes del campeonato (tiene 22 años y una proyección encomiable), Schwegler siga siendo el escudero todo-campista con llegada y el gigante Meier parezca mantener su poderío físico para alcanzar definición certera en el área como perfecto acompañante desde de segunda línea (fue máximo goleador de Bundesliga 2 la pasada temporada con 17 goles). La meta nunca llegará a un estado de éxito mayúsculo que lo coloque como referencia alemana del momento, pero sus registros esperanzan a aquellos anónimos que, desde el calabozo, luchan por su momento de gloria.

Zulte (Bélgica): La Jupiler League es, por su enorme equidad, uno de los campeonatos europeos cuya capacidad de sorpresa crece con el paso de los años. Un mínimo margen entre clubes favoritos y aspirantes, otorga a algunos clubes con una buena base y estructura, a poder competir en la élite durante sus ‘quince minutos de gloria’ que en el caso del Zulte Waregem, se están convirtiendo en más de media temporada. Antepenúltimo la campaña pasada, la renovación mental del equipo llegó a estas alturas de campaña el año pasado, cuando el ex mito del equipo, Francky Dury (que había estado previamente nueve años en el club), recuperó su banquillo. Una enorme capacidad de aprovechamiento de sus ocasiones de gol (es el club que peor diferencia de goles tiene en zona alta) y una base experimentada en la categoría, han conseguido pelear por la primera plaza y retar al mismísimo Anderlecht. Una sola derrota en los últimos trece partidos, le ha permitido soñar con acceder a puestos europeos (más allá del play-off belga). La perla defensiva Malanda Adje, el inteligente llegador francés Berriet (diez goles) y las alternativas ofensivas que compiten dejando grandes réditos (Naessens, Leye y Habibou), están propiciando que el modestísimo equipo de Flandes sea la gran atracción del curso.

Antalyaspor (Turquía): El impacto de la ciudad de Antalya permanecerá con el paso de los años (catalogada por un jefe militar como la ciudad más hermosa del mundo), pero el de estos primeros meses de competición de su club de fútbol, el Antalyaspor, es tan novedoso como dulce. El equipo más importante de la ciudad ha conseguido pelear no solo por zonas europeas que ya se escapaban a sus previsiones, sino pelear con los favoritos. Si echamos la vista atrás, si buscamos en sus vitrinas, encontraremos a un equipo humilde, de los llamados ‘clubes ascensor’. No sería hasta 1982 cuando pudo saborear por primera vez la competición de élite, año en el que el equipo logró ascender a la máxima categoría del fútbol turco. Desde entonces, ascensos y descensos, hasta que en la temporada 1999/2000 el equipo se quedó a las puertas de la gloria, episodio que aún es considerado como el más importante en la historia del club. Sin duda, el momento que está viviendo el equipo en la quinta temporada de Mehmet Özdilek en el banquillo es toda una sorpresa. Para sujetar al bloque, futbolistas con experiencia como Deniz Baris en el centro de la defensa o Ugur Inceman en el centro del campo. Delante del doble pivote, un Ismaïl Aissati que parecía cuesta abajo, el brasileño Tita, el nigeriano Promise y el potente delantero Lamine Diarra. Una de las sorpresas más inesperadas de los últimos tiempos.

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