Histórico
10 noviembre 2011Jose David López

Inglaterra: El dilema del lateral diestro

El sondeo para elegir próximo seleccionador inglés, hace tiempo que empezó a posicionar sus candidatos en los entornos futbolísticos. Se da por sentado que Fabio Capello está ante los últimos meses de su cómodo aunque deseado sillón y que su despedida llegará tras una Eurocopa 2012 donde Inglaterra, de nuevo, será más favorita por su potestad mediática que por su capacidad real para encontrar la partitura que mejor suene. El italiano sigue manteniendo la misma base, una columna vertebral casi intocable formada por una generación de leyendas (Lampard, Gerrard, Terry, Ferdinand, Ashley Cole) que jamás ha logrado sobreponerse a sus obstáculos y alcanzar un éxito que parecía condenado a llegar por su potencial. Este verano, probablemente, será su última oportunidad pues tras la salida de Don Fabio, la regeneración parece un acto tan irrebatible como necesario para empezar de cero la búsqueda de los violines adecuados. Y es que esa pieza, siempre acaba desafinando.

El próximo inquilino de los Three Lions (muy probablemente Harry Redknapp), se encontrará con varios problemas prácticamente encauzados hacia una solución acertada. Joe Hart parece indiscutible en la portería ante la fragilidad de sus competidores (en esta convocatoria ante España, increíblemente entran el nunca comprendido Carson que juega en el Bursaspor y el aún inexperto Stockdale, cedido por el Fulham al Ipswich). Debe haber huecos asegurados para Adam Johnson en el extremo diestro, para Jack Rodwell como mediocentro de recorrido-despliegue, para el talentoso creador Jack Wilshere (ahora lesionado) y para una delantera formada por Agbonlahor-Sturridge-Welbeck. Una línea nacida y gestionada con buenas lecciones en la última generación Sub 21 que, a su vez, ha generado un problema alternativo que asegura un tremendo potencial en el lateral diestro, quizás, el de mayor potencial futuro de toda Europa.

Y no hace falta tomar previsiones previas para que el próximo seleccionador pueda tener esta variedad disponible, sino que todos ellos son una realidad actual, que compite, lucha y trabaja a diario por un carril diestro que está más caro e inaccesible que nunca. Ahora mismo, Inglaterra cuenta con cinco claras alternativas de enorme aptitud, similares sensaciones pero diferentes propuestas y estilos. Desde Phil Jones a su compañero Chris Smalling, pasando por Glen Johnson o Micah Richards sin olvidar a Kyle Walker. Todos, actualmente competidores naturales en clubes de máximo potencial a nivel europeo y acreedores solventes de una demarcación que jamás había dispuesto una disyuntiva de semejante altura.

Por galones, casi haciéndole parecer un veterano pese a tener aún 27 años, debería ser Glen Johnson quien contara con la posibilidad inicial y el beneplácito que le genera su experiencia. El diestro del Liverpool, que tuvo que atravesar obstáculos casi inaccesibles en sus inicios con la repudia del Chelsea y cesiones en clubes menores, encontró en Anfield su mejor nivel y tras una larga lesión, volvió hace no demasiado a empezar a reencontrar sus mejores sensaciones. Aún no ha recuperado un estado físico óptimo pero para Capello sigue siendo la primera elección y, en una tesitura donde Inglaterra se jugara el todo o nada en noventa minutos, seguramente sería el titular.

Micah Richards debería ser, por internacionalidades y temporadas en el primer nivel de exigencia Premier, la segunda opción. Sin embargo, pese a ser quizás uno de los mejores jugadores del curso, haber podido mantener su puesto en un club donde el desembolso también puso en peligro su proyección y merecer dicha consideración, esta vez se ha caído de los planes. Pura potencia, enorme físico, juventud por sus 23 años y la sensación de que su techo aún queda lejos pues, con sus cualidades bien entendidas y reproducidas por el bien colectivo, debería crecer aún más.

Las otras tres opciones han encontrado regularidad y validez en los últimos meses. Chris Smalling fue una apuesta personal de Alex Ferguson, que ha sabido proyectarlo ya no sólo como central natural, sino como carrilero con mucha profundidad y poder táctico, algo que ofrece alternativas a sus entrenadores y que asegura además validez global en cualquier contexto, algo que convenció hace meses a Capello cuando le dio la alternativa. Su mayor enemigo es la competencia directa en el Manchester United con Phil Jones, uno de los fichajes del año en la Premier. Potencia abrumadora, capacitado para actuar de central o mediocentro, aunque en Old Trafford parecen decididos a convertirlo en un lateral diestro de enormes prestaciones, tal y como demuestra su estupendo inicio de campaña.

La última aparición es la de Kyle Walker, un chico criado en una asociación de ayuda a los jóvenes de raza negra en Sheffield, que encontró en una cesión al Aston Villa el pasado año su oportunidad de crecer, experimentar sus cualidades y demostrar ahora en su regreso al Tottenham, tener recorrido, profundidad, velocidad y capacidad de sorpresa para romper defensas con abrumadora solvencia. Fue elegido lateral ideal del último Sub 21 y es la atracción revelación de la Premier. Estos tres últimos ejemplos, todos criados en la última generación inglesa, no supera los 21 años.

Cinco posibilidades, máxima juventud, un futuro alentador y la clara sensación de que Inglaterra necesitará regenerarse y mejorar en posiciones determinadas, pero que no habrá que preocuparse por su lateral diestro en la próxima década.

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