Histórico
28 noviembre 2011Jose David López

Apuntes de la jornada internacional

Caligiuri - MainzLazio-Juventus (0-1):

Había comentado antes del partido el gran Gianluigi Buffon que sacar los tres puntos del Olímpico en la semana en la que también tienen que visitar San Paolo (este martes debido a la suspensión en su día por la lluvia), sería un golpe moral interesante. Y ahora, ese efecto positivo ya debe estar en su cuerpo porque los bianconeri, sufriendo y yendo claramente de menos a más en el partido, aprovecharon un momento de lucidez a la contra para que Pepe batiera a Marchetti justo acto seguido de que Rocchi hubiera desperdiciado una ocasión clarísima ante el propio Buffon. Fue el único error que pudo superar al portero laziale, con mucho, el mejor del partido. Pese a que en la segunda parte Hernanes, Klose o Cissé pusieron a prueba la estabilidad de la Vecchia, no encontraron premio y en uno de los choques más flojos de los de Antonio Conte sacaron una importantísima alegría en una semana clave.

Liverpool-Manchester City (1-1):

Conocedor del resto de resultados de la jornada, la tarde dominical del Manchester City en Anfield tenía un reto peligroso en el equipo de Kenny Dalglish pero igualmente, muchos condicionantes positivos como la opción de meter más puntos al Manchester United. Y pese a que en los primeros minutos los de Mancini parecían decididos a llevarse la victoria, el buen trabajo de Charlie Adam en la medular, fue equilibrando el partido poco a poco. Pero hablaron las individualidades. Kompany se adelantó a todos de cabeza en un saque de esquina y, poco después, el citado Adam disparó con potencia y su disparo, desviado por Lescott, se fue a la red. En la segunda mitad el peso fue de los Reds, sobre todo tras otra absurda expulsión a Balotelli que pudo costar muy caro al líder. Un arreón final que, pese a todo, repartió puntos.

Mainz-Bayern (3-2):

La Bundesliga demuestra semana a semana estar en un momento dulce a nivel global. Ambiente festivo, mucha competitividad y partidos con enormes detalles. El del Badenova de este domingo, con un escenario completamente vanguardista, nuevo y que deseaba retar al Bayern, fue un espectáculo que atestigua las razones que dan brillantez al campeonato germano. Los de Tuchel se adelantaron con una preciosa jugada de Muller que supo definir con frialdad su mejor jugador, Ivanschitz. Pese a llevar el peso el equipo local, presionando arriba al Bayern y dejando ver sus enormes problemas en la creación, siempre se asomaba con peligro hasta que, ya en la segunda parte, Van Buyten empató de cabeza (especialidad).

El choque entró en éxtasis porque el guión lógico apuntaba a una remontada muniquesa que jamás se produjo. Cuando más sufrían los locales, Caligiuri se sacó un misil desde larga distancia y, al instante, con el mazazo muniqués encima, Bungert aumentaba distancias de cabeza. Aunque poco después Van Buyten volvió a mostrar su soltura para remata en jugadas con balones divididos y descontó, no sirvió esta vez el empuje de los de Heynckes hasta el final. Partidazo que iguala la Bundesliga.

Olympique Marsella-PSG (3-0)

El Clásico del fútbol francés llegaba al Velodrome con dos caras distintas, pues el Marsella no atraviesa su mejor momento y está en zona media mientras el PSG, pese a haber perdido en la anterior jornada, mantenía el liderato. Cumplió las expectativas de tensión, ritmo e intensidad, aunque por momentos todas estas premisas fueron excesivas. La presencia de jugadores de enorme físico y agresividad en la medular, como Mbia, Diawara, Alou Diarra, Sissoko o Matuidi, provocó multitud de roces constantes, de entradas excesivamente duras y de parones continuos en el guión del juego. Pero como Remy anotó de cabeza un golazo tras centro medido de Azpilicueta antes del cuarto de hora, el PSG estaba obligado y aseguraba competitividad y nada de conformismos. Pese a que los parisinos tuvieron a la media hora un disparo al poste de Sissoko, fue lo único que intimidó a Mandanda.

En la segunda parte Kombouare arriesgó, sentó a la vez a Pastore-Gameiro y aunque intentó cambiar el guión, el Marsella creció y acabó ganando con solvencia con dos goles más de Amalfitano en un grave error visitante en la transición ofensiva, y uno de Ayew ya en el tramo final. Se estrecha la Ligue 1, entra en la lucha el Marsella y peligro para un Kombouare que ahora más que nunca sí puede estar a punto de ser cesado.

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