El Valencia se obliga a ganar en Alemania después de sumar un insuficiente empate ante el Werder Bremen en Mestalla (1-1). Los ché apelaron al orgullo para remontar el gol de Frings, tras un penalti injusto, y la expulsión con roja directa de Éver Banega. El gol de Mata minimiza los daños, pero sitúa al Valencia en una posición muy comprometida.