Histórico
15 agosto 2009Jose David López

Portugal arranca con estrellas renovadas

liga-sagresObligada a subsistir a sombra de sus hermanas mayores (Liga, Premier, Bundesliga, Ligue 1…) pero consciente de ser una de las mejores plataformas para el progreso del fútbol europeo, la Liga Sagres portuguesa explota mejor que nunca ese rango en el que ha quedado encuadrada desde hace más de una década. Jugadores de nivel secundario, estrellas rebotadas de destinos más jugosos que no marcharon por el camino positivo y jóvenes que intentan lucirse en su primer escaparate continental, aglutinan la base de un campeonato que buscará campeón entre los de siempre.

No cambian las ubicaciones donde se dilucidará el campeonato ni tampoco los equipos obligados a luchar por el título pero, rompiendo la dinámica general de los últimos años, el campeonato portugues sí ha revolucionado las plantillas de los aspirantes. El Oporto busca su quinta conquista consecutiva con una cara nueva que recalca su estilo vendedor, el Benfica inicia su enésimo proyecto en busca de la regularidad que se le resiste en los últimos lustros y el Sporting de Lisboa apuesta de nuevo por la continuidad en un esquema sobradamente conocido que no acaba de explotar como se esperaba. Tres clásicos que se reparten nada menos que 73 de los 75 títulos ligueros que se han disputado en Portugal donde sólo Boavista y Os Belenenses rompieron una dinámica prácticamente imposible de quebrantar.

Do Dragao había conseguido más estabilidad que nunca en el último año. Jesualdo Ferreira conseguía sacar jugo a una plantilla con muchas cualidades y ampliamente competitiva que incluso plantó cara al todopoderoso Manchester United en la Champions. Venció con autoridad el campeonato pasado pero, pese a dar ese salto en Europa que le había mostrado de nuevo al primer nivel, los despachos volvieron a dar salida a sus estrellas en una práctica frecuente durante los últimos años. Se evita el crecimiento del club, no puede negar la marcha a sus mejores jugadores pero, pese a todo, siempre acaba por encontrar solución a la altura de lo que se espera. Se han fugado muchos, (en total, contando cedidos y canteranos, nada menos que 40 operaciones) aunque la pérdida más notable la representan los Lisandro López, ‘Lucho’ González y Cissokho, que buscan su crecimiento personal al mismo tiempo que Belluschi, Falcao, Pereira, Valeri, Maicon o Prediger (todos ellos sudamericanos), buscarán suplirles con éxito. Nuevas caras, renovación absoluta (salvo Bruno Alves y Hulk) pero el mismo estilo de Jesualdo Ferreira que, pese a los rumores, sigue al frente.

La capital vuelve a ser la encargada de amenazar ese reinado blanquiazul. El Benfica ha vuelto a reinventarse desde cero con la puesta a punto de un nuevo proyecto tras el no demasiado positivo paso de Quique Flores. Da Luz necesita volver a hacerse notar, sentirse fuerte, capaz, confiado en sus posibilidades y ése carácter lo busca con Jorge Jesús, un técnico perfectamente conocedor del fútbol luso tras dos décadas dirigiendo en su país que se topa con la gran oportunidad de su vida tras colocar en quinta plaza al Braga la campaña pasada. No estará solo pues las Águilas han logrado reforzar (aparentemente muy bien dentro de sus posibilidades) su nómina con jugadores como Saviola, Keirrison, Javi García y dos prometedores brasileños: Patric, lateral derecho de sólo 20 años y Ramires, una de las nuevas ‘perlas’ que ya convoca Dunga. Unidos a la continuidad de Luisao (a punto estuvo de marcharse), la importancia que va a tomar Cardoso por lo visto en pretemporada, Sidnei, Martins y la esperada progresión de Urretaviscaya, las expectativas vuelven a ser altas.

Tercero en discordia parece estar colocado el Sporting de Lisboa que tiene una cara muy favorable respecto a los demás en esta campaña pero que, a su vez, es el principal obstáculo para su crecimiento. Los leones han vuelto a confiar en su cantera y en aquella generación que aún debe explotar y que lideran con menos éxito del esperado los Moutinho, Veloso, Djaló o Pereirinha. Siguen contando con el apoyo ya conocido de Vukcevic, Liedson, Postiga, Tonel, Polga o Rui Patricio y sólo han firmado a dos jugadores: Felipe Caicedo y Matías Fernandez. Ambos estaban considerados hace no demasiado como ‘perlas’ sudamericanas a punto de explotar y quizás les toque desarrollar su potencial en Lisboa tras sus primeras y fallidas experiencias continentales. Dos refuerzos muy bien encauzados y que Paulo Bento tendrá que saber encajar en un equipo que, con muchísimos apuros, se coló en la última fase previa de la Champions algo imprescindible para no rezagarse aún más.

Más allá del trío de clásicos se antoja tan complicado como voluble el aventurarse a dar nombres de equipos que puedan increparles por los primeros puestos aunque en un campeonato tan duro y equitativo como el luso nunca faltan sorpresas. Braga, Leixoes o P.Ferreira puede dar el susto en cualquier jornada pero difícilmente lograrán aguantar el ritmo. Y es que nada menos que diez equipos (de los 16 que forman el campeonato), no han gastado ni un solo euro en contrataciones, tirando de ingenio y veracidad comercial para renovarse. Un dato que evidencia problemas económicos pero que no evitará que, como siempre, las estrellas vuelvan a surgir en uno de los escaparates más observados desde la ‘Vieja Europa’.

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