Histórico
5 agosto 2009José Mendoza

La reestructuración del Valladolid

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Estar a un gol del descenso es una emoción demasiado fuerte como para querer repetirla. Con el susto en el cuerpo tras una primera vuelta brillante y una segunda peligrosa, el Real Valladolid ha llevado a cabo una profunda remodelación de la plantilla en la que se han tocado varios de los pilares más importantes, desde Asenjo hasta Goitom.

Pocos clubes variarán tanto de un año a otro. A menos de un mes para que empiece la competición, el conjunto pucelano cuenta con hasta trece caras nuevas en su plantilla, contando los que regresan tras cesión, y once bajas. Una política de fichajes en la que imperan jugadores de un perfil medio, jóvenes, sin experiencia en Primera y con una carrera aún por desarrollar.

El traspaso de Sergio Asenjo estaba cantado. La portería del José Zorrilla se le había quedado pequeña y era cuestión de tiempo que abandonara el barco. El Valladolid ha optado por sustituirle con tres porteros que parten en igualdad de condiciones y que cualquiera de ellos puede ser titular. A Justo Villar, cuyas actuaciones estaban por debajo del nivel esperado, se le han sumado el repescado Jacobo, que llega con minutos en la élite, y Fabricio, después de la polémica con su contrato en el Deportivo.

En la defensa, la experiencia y la juventud de Nivaldo y César Arzo llegan para suplir la baja del retirado García Calvo y de Iñaki Bea. Pelearán, también, en igualdad de condiciones con Baraja y Luis Prieto. En las alas, el mítico Marcos sigue partiendo como indiscutible por la izquierda. Esta temporada ni siquiera tiene recambio natural debido a la baja de Óscar Sánchez, aunque Barragán y Pedro López podrían amoldarse si es necesario.

La baja de Vivar Dorado en el mediocentro la suplirá Pelé, promesa portuguesa que llega cedido por el Oporto. Álvaro Rubio, Borja y Medunjanin -que no cumplió con las expectativas-, son los otros inquilinos de la demarcación que menos ha cambiado.

En la línea de mediaspuntas hay muchos cambios. Han llegado hasta cuatro nuevos jugadores. Para la derecha, Pedro León, que se ha topado con una difícil situación en esta pretemporada, se encontrará con tres jugadores que pueden actuar ahí, Nauzet Alemán, Héctor Font y Marquitos, que también pueden jugar por el centro o en la izquierda.

En el otro flanco parece indiscutible Jonathan Sesma siempre que esté en buena forma, mientras que Canobbio parte con ventaja para la mediapunta tras la baja de Víctor. Ahí estará la variante de Mendilibar, donde se le abre un abanico de posibilidades muy grande, pues todos ellos se pueden amoldar a cualquiera de las tres demarcaciones de la mediapunta, o bien puede el técnico alinear a dos puntas.

Y es que en la delantera es donde presenta más novedades el equipo pucelano. Tras la marcha de Joseba Llorente, la responsabilidad recayó en Ogbeche y Goitom, que aunque anotaron 11 goles, tenían el listón demasiado alto. Por ello, el Valladolid se reforzó con hasta tres delanteros con hambre de triunfar en Primera.

Manucho, Alberto Bueno y Diego Costa son las apuestas más ambiciosas del equipo de Mendilibar esta temporada. Ellos tendrá la responsabilidad de anotar. Serán importantes, pues en Zorrilla ya saben que un gol es la delgada línea que separa el éxito del fracaso.

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